‘’ No sé ni por donde empezar amigo, era… era, joder, era increíble, totalmente imperfecta, así, como a mi me gustan. Con defectos, pero ojo, eran adorables.
Tenía el pelo hasta el ombligo… ¡Y sí! Me he imaginado su ombligo, lo que conlleva a imaginarla sin camiseta.
¡Ah! También era pelirroja, pero de las oscuras, bueno, quizás no era pelirroja exactamente, era un color caoba de esos que te invitan a perderte. Y era ondulado, sí, ondulado, era como el recuerdo de unos rizos, y no sabes como me hubiera gustado ver esas ondas saltar mientras todo su cuerpo bailaba, ah sí, aún no te he hablado de su cuerpo, verás… era indescriptible, vale, vale, no te imagines a una modelo, porque no es así, pero tiene las curvas suficientes como para tentar al deseo.
¡Uf! Y sus labios, hay que ver ¡que bonitos eran! Finos y pintados de rosa claro, no paraba de mordérselos, seguro que es una manía suya…
La nariz era respingona y chiquitita, sin más.
Los ojos… otro mundo donde perderse, de verdad te lo digo, eran increíblemente grises, ¿sabes? El gris nunca me había parecido un color bonito, pero desde esta tarde esa opinión ha cambiado… vaya que si a cambiado. De verdad, eran grises como la plata, la luna, el metal, pero no eran fríos ¡que va! Estaban llenos de sentimientos y sueños, no sé cómo, pero le ví los sueños a través de sus ojos… y tenían brillo, mucho brillo.
La forma de su cara era como la de las muñecas, esas que tienen las mejillas rosadas y la piel pálida, ¿oye, te he dicho ya que era blanca como la nieve? Tenía pecas también, un millón por lo menos, ¡hasta en los labios!
Parecía tan necesitada, estaba pidiendo a gritos a alguien que la protegiera, me lo dijeron sus manos, que eran preciosas, de chelista, claro que sí.
Y de nombre amor, y de sentimiento Diana, o quizás era al revés… ’’
PD: En la próxima entrada traigo una sorpresa que va a durar durante todo Septiembre :)