domingo, 30 de septiembre de 2018

Un incendio que nunca se saciaba.

Siempre he sido de perder el imperdible, sentirme esclava de mi libertad y mirar muy fijamente los carteles de “prohibido jugar a la pelota” mientras los niños juegan a la pelota, porque son niños. Grito en silencio cada vez que alguien pide perdón por la poesía. No pidas perdón por la poesía, no pidas...

martes, 4 de septiembre de 2018